jueves, 13 de diciembre de 2007

HIPÉRBOLAS

-¿Normal?¿Qué quieres decir con normal? No existe el “ser comocualquiera” y a la vez todos somos cualquiera para quien no somos todo.

-Te equivocas, todos somos, en el fondo, muy iguales: animales, mamíferos, primates, Homo sapiens... Las mismas hormonas provocan nuestro enamoramiento, generan nuestra agresividad, los mismos neurotransmisores nos hacen sentir felices o infelices. Observa a un grupo de chimpancés y verás cómo sus comportamientos son estandarizados, el grado de estandarización aumenta con la profundidad del conocimiento.

Tú y yo y todos y cualquiera, respondemos a patrones, estamos determinados por la genética, la época, el clima... Todo eso nos puede hacer sentir diferentes unos de otros, pero ese propio sentimiento de exclusividad es reproducible en otros seres.

-No comprendo lo que me quieres decir, yo siempre me he sentido rara, excluida, diferente, nunca he sido como los demás, siempre me han marginado.

-¿Quienes son los demás? Observa a un grupo de leones: muchas veces ocurre que uno de ellos abandona la manada y se dedica a vagar por la sabana en solitario hasta morir. Es un solo león en ese grupo, pero ocurre en muchos grupos, ha venido observándose a lo largo del tiempo en innumerables ocasiones. La única razón es un desequilibrio hormonal que provoca una enorme agresividad en el león que entrará en competencia con el macho dominante, si no puede vencer, abandona la manada. Tú eres un animal; cuando lo asumas, lo entenderás todo.

-Estás comparando cosas muy distintas, yo tengo capacidad de raciocinio, de abstracción, no soy un león, un león no tiene consciencia de la existencia de otros como él, no puede sentirse solo.

-¿Y de qué te sirve la razón? Sólo para hacerte preguntas como ésta, preguntas cuya respuesta no va a cambiar tu sentimiento de aislamiento, es un sentimiento bioquímico, ¿sabes qué lo cambiaría?

-¿Qué? No creo que pueda ser cambiado.

-Creeme que sí, si quieres sentirte como todos prueba con una buena dosis de serotonina, muchas drogas podrían ayudarte, dejarás de hacerte estas preguntas.

-Pero así no sería yo, sería mi mente confundida por el efecto de una sustancia.

-No le des más importancia a la genética que a la química. El ADN es sólo un ácido, dentro de poco perfectamente modificable. Lo único que nos hace exclusivos es también lo que nos hace tan iguales. Tu ADN eres tú, sí, pero es el ADN de un primate, de cualquier primate.

-Creo que empiezo a comprender lo que me dices pero no estoy totalmente de acuerdo contigo, sabes, creo que tu planteamiento es estrictamente biológico, hay más en el ser humano, hay algo que trasciende la biología.

-Mi planteamiento es el único posible, todo lo demás se deriva de ese planteamiento. Hay que saber por donde empezar a buscar la verdad, sólo que a veces, cuando la encuentras, no quieres asumirla y te sigues haciendo preguntas que ya has respondido, porque está en tu naturaleza el seguir preguntando. Tú y yo, y toda la vida que nos rodea fuimos hace mucho una sola bacteria y volveremos a serlo, seremos millones de bacterias, después de ser larvas, moscas, coleópteros... Antes y después de esto sólo fuimos y seremos carbono, hidrógeno, nitrógeno y oxígeno. Durante un brevísimo periodo de nuestro largo ciclo hemos tenido conciencia de ello, nos hemos sentido “algo” y queremos prolongar esa conciencia más allá de lo posible.

Deja ya de pensar y vive, en la vida sólo tiene sentido vivir.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Maravilloso. No te desanimes. Gracias